Aprender Salud
¿Cefalea o migraña?
Son las dos causas más frecuentes de los molestos dolores de cabeza, aunque su origen y tratamiento son diferentes.
¡¿Por qué me duele la cabeza?! Si bien existen muchas causas posibles, los dos tipos más comunes son la llamada cefalea tensional y la migraña, cuyo origen y tratamiento son diferentes.
Es importante diferenciarlas ya que estos dolores suelen llevar al consumo de fármacos de venta libre que pueden ocasionar efectos adversos para la salud. Una nota del archivo de Aprender Salud, basada en los conceptos provistos por la Dra. Adela Aguirre, del Servicio de Clínica Médica.
La cefalea tensional y las posiciones viciosas
En pacientes jóvenes y de mediana edad, la causa más frecuente de dolor de cabeza es la llamada cefalea tensional. Por ejemplo, quienes pasan largas horas en un escritorio o frente a la PC sin una silla con diseño ergonómico adecuado. La altura y ubicación del monitor también pueden ser motivo de dolores de cabeza, así como el acarreo de bolsos, mochilas pesadas, una mala posición de manejo o una almohada incómoda. Y por supuesto el estrés, un gran componente de la cefalea tensional.
En los adultos mayores es menos frecuente el dolor de cabeza ya que ellos no tienen tantas actividades de este tipo pero la contractura sigue siendo la causa más frecuente. Se suelen sumar dolores de cuello y en la zona lumbar por afecciones crónicas.
La cefalea tensional no tiene relación con las comidas ni con el consumo de alcohol, modificar la postura y realizar actividad física previenen su aparición.
Un analgésico trae alivio pero no trabaja sobre las causas del dolor. Por eso, cuando el dolor se repite es más beneficiosa la actividad física (elongación, yoga, kinesiología, etc.) ya que permite alinear el cuerpo y mejorar las causas de la cefalea (repartir mejor el peso de carga, cambiar el escritorio o la silla, etc.).
La migraña, la herencia y las comidas
Es una patología muy frecuente, benigna pero poco diagnosticada. Es un dolor diferente, de origen hereditario, que se siente en una mitad de la cabeza y se acompaña de otros síntomas como molestias a la luz o en la visión, incluso sensaciones olfativas. Son muy intensas, pueden durar varios días y tienen un tratamiento específico. Se pueden acompañar de náuseas o vómitos y raramente surgen complicaciones severas.
“Algo me cayó mal al hígado y me duele la cabeza” es una expresión común que puede ser indicio de una migraña, pero esto no es una regla universal. Igualmente, los pacientes con migraña suelen identificar bien, con el tiempo, cuáles son las comidas o bebidas que les provocan dolor y en qué proporción los afecta.
La migraña es una patología muy frecuente, benigna pero poco diagnosticada.
Los alimentos más comúnmente asociados a la migraña son los que contienen conservantes, el alcohol y algunos condimentos, entre otros. La falta de descanso, el ayuno, la ingesta copiosa de comida, los cambios climáticos y el estrés también pueden ser desencadenantes.
Los riesgos de tomar siempre analgésicos son muchos. Los antiinflamatorios, las drogas más consumidas en el mundo, tienen un gran perfil de efectos adversos. En caso de utilizar fármacos, se recomiendan los de menor perfil de efectos adversos, como el paracetamol.
Usted y su médico de cabecera conocen si alguna vez le dolió o tiene una cefalea crónica. Es importante tocar este tema en su consulta periódica.
¿Cuándo es motivo de consulta urgente? Por ejemplo, cuando un adulto presenta cefalea por primera vez en su vida o si ese dolor se acompaña de algún síntoma neurológico como dificultad de hablar o de comprender, para mover alguna parte del cuerpo o en la visión (ve borroso o no ve). También si se acompaña de náuseas, vómitos o fiebre. Quienes padecen dolores de cabeza frecuentes, habrán de concurrir si es un dolor mayor al habitual, su localización es distinta o no calma con analgésicos.
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