Aprender Salud
Chicos seguros, papás tranquilos: ¿cómo prevenir las caídas en los bebés?
Según la etapa de crecimiento, tomar algunos sencillos recaudos puede ayudar prevenir accidentes graves.
Basada en los conceptos provistos por el Depto. de Pediatría del Hospital, Programas Médicos y Aprender Salud.
Se suele decir que los chicos “son de goma” porque en el aprendizaje de sus movimientos suelen sufrir más de un golpe que no los amedrenta ni les impide seguir explorando el mundo. Sin embargo, por su rápida y permanente adquisición de nuevas habilidades, es probable que se den situaciones potencialmente peligrosas que no sean advertidas por los papás o cuidadores. En esta nota, un resumen con lo más importante a considerar en las diferentes etapas del crecimiento.
Hasta los 4 meses: “mejor no confiarse”. Es probable que los primeros movimientos no parezcan peligrosos para cambiarlo pero la distracción a la hora de darse vuelta para agarrar el pañal es un típico motivo de consulta en la guardia por accidentes. Lo mejor es preparar todos los elementos para cambiarlo o tenerlo listos en un lugar específico y, así, nunca perder de vista al bebé.
Entre los 4 y 6 meses: “siempre en un lugar seguro”. En esta etapa, cuando ya rolan y se mueven, no basta con una almohada para evitar caídas ya que pueden girar sobre ellas o correrlas con los pies. Si va a dormir en un lugar ajeno a su cuna o corral, mejor que sea en el cochecito, atado. Quizás duerma menos tiempo pero es lo más seguro.
Entre los 6 y 8 meses: “peligro, bebé gateando”. Ahora es momento de elevar los objetos y adornos que antes ocupaban un lugar preferencial de la casa, como también bloquear el acceso a estufas, enchufes, escaleras y puertas o cajones (se pueden instalar trabas de seguridad).
Entre los 8-9 meses: “me caigo y me levanto”. Evitar que se caiga cuando comienza a pararse es casi imposible. Sin embargo, se puede hacer lugar para que se desplace sin encontrar obstáculos con puntas duras o filosas (muebles, mesas, etc.). Y es importante no dejar objetos pesados en el borde de las mesas o manteles al alcance de su mano. Los andadores no están recomendados.
A partir de 1 año: “el dueño de la casa”. El bebé, cuandoempieza a caminar, descubre y explora casi todo lo que esté a su alcance sin entender el concepto de lo que es peligroso. Habrá que cerrar lugares inseguros (accesos a balcones, escaleras, ventanas bajas) y evitar que se desplace en medias, ya que propician los resbalones.
Más adelante. Con el crecimiento, el niño irá aprendiendo a entender qué es peligroso, qué hay que evitar o lo que se puede y no se puede hacer. Igualmente puede ayudar colocar protectores a ambos lados de las escaleras y proteger balcones. Si ya anda en bicicleta o triciclo, se sugiere el uso de elementos protectores (casco, coderas, etc.).
Nota perteneciente a la revista Aprender Salud N° 38