Si te piden más estudios, ¿te están cuidando más? ¿Qué importancia tienen los acuerdos entre especialidades en este sentido? Lo exploramos con el Servicio de Medicina Familiar y Comunitaria que propone una evolución al tradicional chequeo: la entrevista preventiva. 

Los avances científicos, el intercambio entre las distintas especialidades y el vínculo constante con los pacientes están cambiando la manera de pensar la prevención. Actualmente se valora más el encuentro con el médico/a que la cantidad de estudios que se piden en las consultas.

Es un tema que va adquiriendo importancia en la medicina y que proponemos abrir en esta nota especial con algunas situaciones y perspectivas de médicos, pacientes y familias. 

Si te piden más estudios, ¿te están cuidando más?
La idea de prevención, que significa actuar antes para evitar o disminuir la probabilidad de que ocurra un evento indeseable como una enfermedad, es uno de los grandes logros de la ciencia. Ejemplos claros son las vacunas o algo tan simple como el lavado de manos. Sin embargo, no hay que desconocerlo: la prevención también tiene sus límites.

"La mayoría de las personas cree que cuántos más estudios se hacen es mejor. Incluso, piensan que pedir más estudios nunca trae consecuencias negativas. Cambiar esa idea no es fácil.” 

El límite de la prevención  es “enfermar” a los sanos. Esto se pone de manifiesto, especialmente, en los estudios de screening o tamizaje, que intentan detectar enfermedades en personas asintomáticas o aparentemente sanas. Conllevan riesgos y beneficios. Entre los riesgos se puede mencionar:

• La incertidumbre.  En la medicina, la incertidumbre está siempre presente, aunque a veces pareciera que en el consultorio no existe: “La gente tiene que saber que siempre hay un grado de incertidumbre, más allá del conocimiento del profesional”.
• Un estudio de screening no siempre da el veredicto de sano o enfermo. Muchas veces, ampliará la información, producirá nuevas dudas, lo que puede generar que se realicen más estudios, más preguntas y más ansiedad. Sería, haciendo una analogía, como verse la cara con una lupa: si acercás demasiado la mirada, vas a empezar a notar imperfecciones que antes no veías. Lo mismo sucede con ciertos estudios médicos, a veces revelan detalles que no necesariamente son un problema, pero que igual te dejan preocupado.
• El problema no es el costo económico del estudio. Sino la posibilidad de sufrir una incertidumbre mayor, una preocupación mayor. Ese podría ser el costo de un estudio realizado “porque sí”. También existen costos indirectos como la necesidad de tomar un día libre del trabajo o la dificultad para encontrar un centro médico conveniente.

 “¿Por qué no me piden más algunos estudios? ¿La mamografía no se hace más cada año? ¿Es por ahorrar dinero?” Se preguntan los pacientes.

Nuevos acuerdos entre los especialistas, una gran noticia
Como la mayoría de las personas ven a diferentes profesionales a lo largo de su vida, es fundamental que los especialistas que conforman los distintos equipos de salud trabajen en conjunto. Esto ayuda a que el mensaje sea claro y las decisiones estén centradas en la persona.
En nuestro Hospital, los especialistas de los Servicios de Ginecología, Clínica Médica, Diagnóstico por Imágenes y Medicina Familiar y Comunitaria trabajaron juntos para definir a quiénes y cuándo es necesario realizar ciertos estudios. 
Estos acuerdos se basan en la mejor evidencia científica disponible y abordan prácticas como el test de Papanicolau (PAP), la mamografía, la ecografía transvaginal, el dosaje de vitamina D y la densitometría ósea.

Algunos ejemplos de las prácticas acordadas son:

• No se recomienda hacer ecografía transvaginal de rutina en personas sin síntomas.
• Los estudios mamarios en mujeres menores de 40 años asintomáticas y sin antecedentes familiares no se recomiendan de rutina (encontrá las novedades en esta nota).
•  La colposcopía, no realizarla de rutina para prevenir el cáncer de cuello de útero.
• El Pap tiene recomendaciones claras sobre cuándo empezar, cada cuánto y hasta qué edad hacerlo (más info acá).
   

"Hablar todos el mismo idioma en el hospital es fundamental. Así, los pacientes reciben un mensaje coherente y claro. El desafío es que podamos realizarlo y sostenerlo", destacan los profesionales.

Otros acuerdos más recientes. El Servicio de Medicina Familiar y Comunitaria junto con los Servicios de Endocrinología, Clínica Médica y Ginecología han acordado cómo hacer el seguimiento de las personas con hipotiroidismo. “Según la última evidencia disponible el seguimiento del hipotiroidismo puede hacerse solo con TSH; la ecografía no se recomienda de rutina y solo se solicita en casos puntuales y de forma personalizada”, destacan.

“El valor de encontrarnos con nuestro médico de confianza”
Las Dras. Paula Riganti y Dolores Arceo, nueva jefa del Servicio de Medicina Familiar y Comunitaria, enfatizan en el encuentro que se produce en la consulta. Y proponen el concepto de “entrevista preventiva” como la evolución del tradicional “chequeo médico”.

El valor del encuentro. “Lo más valioso del encuentro con tu médico o médica de confianza no son los estudios que te pueda pedir, sino justamente el encuentro en sí. Que te conozca, que puedas contarle tus dudas, revisar juntos tus hábitos de vida y pensar en estrategias para cuidarte”, destacan.

Del chequeo a la entrevista preventiva. “El concepto ha evolucionado y a este encuentro nos gusta llamarlo entrevista preventiva. Se trata de una consulta individualizada con un profesional de tu confianza, que te conoce y está comprometido con acompañarte en el cuidado de tu salud a lo largo del tiempo.” 

“Estas características hacen que en la consulta exista un espacio para una revisión de tu estado de salud y el pedido de eventuales estudios, si es que están indicados, y otro espacio que permita conversar sobre cómo te sentís, qué cambios podés hacer para cuidarte de la manera que consideres más adecuada”, señalan.

“Esta forma de encontrarse en la entrevista preventiva revaloriza el trabajo entre los profesionales y los pacientes y sus familias y el conocimiento de la persona a lo largo de los años.”

"Hoy son muy pocos los estudios de screening que se recomiendan para toda la población adulta. La mayoría se define de forma individualizada teniendo en cuenta a cada persona y su contexto", concluyen.

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Contenido elaborado por el Área de Educación para la Salud. Participación y supervisión, Servicio de Medicina Familiar y Comunitaria del Hospital Italiano. 

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